En una de las ciudades más poblada del planeta y entre más de 21 millones de personas no es fácil hacerse un hueco. Menos aún lo es destacar en ese hervidero de caos controlado que es Pekín. Para diferenciarse en el bullicio ser un entrenador de fútbol nacido en la otra punta del globo y que aterriza para dirigir al Beijing Guoan puede ser un buen punto de partida. Pero nada más; de ahí en adelante los números, al igual que en cualquier otra competición, mandan y dictan sentencia.
Gregorio Manzano (Bailén, 1956) ha conseguido después de una temporada al frente del equipo de la capital de China dejar su impronta en la máxima competición del gigante asiático. A falta de tres jornadas para la finalización del campeonato, en el Workers Stadium (Estadio de los Trabajadores) ya saben que el próximo año podrán disfrutar de la Champions League de Asia tras la meritoria clasificación de su equipo. Los 60 puntos que acumula el conjunto del entrenador español -récord histórico de la entidad- le han valido para asegurar la competición continental así como la segunda plaza liguera en lo que ya es un hito para el jiennense.
La clave del éxito del Beijing Guoan en el torneo de la regularidad ha radicado en la solidez defensiva, lo que ha llevado a los capitalinos a erigirse como el equipo menos goleado de entre los dieciséis que conforman el escalón más alto del fútbol chino. A partir del entramado de contención y gracias a los 47 tantos a favor hasta la fecha, los de ‘Goyo‘ Manzano han firmado diecinueve victorias, a sólo dos del primer clasificado, el Guangzhou Evergrande.
En Pekín y jugando como local, el Workers Stadium ha sido un fortín infranqueable para los visitantes, pues casi dos tercios de los puntos totales logrados por el Guoan (37) se cosecharon a lo largo de los meses en el estadio de la megaurbe. Para un técnico debutante en una competición lejana como la china los números conseguidos por Manzano brillan con luz propia. Sólo el equipo del campeón del mundo italiano Marcelo Lippi ha superado los registros de un equipo muy inferior en cuanto a recursos económicos.
En el estadio del noroeste de la ciudad, la actuación liguera del Beijing Guoan ha servido para fidelizar a una afición que ha visto cómo su equipo, liderado por el técnico de la provincia de Jaén, ha disputado de tú a tú el título liguero ante figuras internacionales como Alessandro Diamanti (ex-West Ham United, Bolonia FC) o Alberto Gilardino (ex- AC Milán, Fiorentina).
Para Gregorio Manzano ahora, después de la enriquecedora experiencia en Asia, el futuro queda abierto. La Champions League le aguarda en el Estadio de los Trabajadores, pero quién sabe si el jiennense emprenderá el camino de vuelta a la península ibérica para volver a dirigir en la Liga española. La enriquecedora experiencia en la capital china será el último y reluciente ejemplo de su buen hacer desde los banquillos. En Pekín, a más de 9.000 kilómetros de distancia, pueden dar fe de ello: su nombre será recordado.
Autor: Fernando Alcalá-Zamora | octubre 07, 2014
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